DOS PAKETS POR VALENCIA, SIERRA CALDERONA
Aprovechando que coincidíamos en Valencia Klass y yo (David), decidimos quedar para hacer una rutilla por la sierra valenciana La Calderona.
Tras buscar rutas por internet, encontré una, que tenía muy buena pinta, circular, y de no muchos kms. solo 30. Con esta distancia nos daba menos miedo afrontar una ruta con el calor y humedad de la zona levantina. Imaginaos, un holandés y un madrileño sufriendo los excesos del clima valenciano.
Total, que a las 9:00 de la mañana, estábamos preparados en el pueblo de Gátova, punto de partida de nuestra ruta. Con ritmo tranquilo afrontamos los primeros kms de la ruta, siempre hacia arriba, pero muy llevaderos, hasta que justo antes de la cima, la pista se tornó casi en pared, molinillo al canto, y primeras gotas importantes de sudor, bueno gotas...chorros, jajaja.
Klass tiene problemas con el cambio, pero decidimos continuar (en buena hora), no puede usar las dos coronas más grandes, pero si el plato pequeño.
Arriba, vistas impresionantes, fotos, merece la pena. Comenzamos a bajar, siempre por trialera, más o menos complicada, pero si tregua. Todo bien, hasta que llegamos a una trialera en bajada con un porcentaje infernal, y con una zanja en medio de al menos 50 cm. Pierdo el control en este tramo, y aunque con equlibrio, no soy capaz de parar la bici, pie a tierra mientras intento parar, pero imposible, así que en cuanto puedo, salto hacia arriba, y dejo la bici bajar "sola", por suerte, caigo de pie, pienso, "buff, de la que me he librado", pero no he terminado mi reflexión, cuando oigo por detrás, "AAAAAHHHHHHHH", me giro, y veo a Klass, ya por los aires, había salido por las orejas, no había tenido tanta suerte como yo, espeluznante caida, salgo corriendo para socorrerle, por suerte solo fueron rasguños, y un leve dolor en el hombro. Tras un rato para recuperarnos de los sustos, seguimos la ruta.
Llegamos a un valle precioso, cuando Klass pincha, bueno, más bien multipincha, tenía no se cuantas rajas por la cámara. Nos disponemos a cambiar la cámara, cuando...¡oh! sorpresa, la bici es nueva, y la cámara de válvula fina, solo teníamos repuesto de válvula gorda. Buffffff!, que momentos, nada podíamos hacer, estábamos en medio de la nada sin poder continuar dando pedales.
De repente, vemos venir hacia nosotros un todo terreno, "estamos salvados" pensamos, "voy a pedirles que me acerquen al coche, y vuelvo a buscarte" le digo a Klass, "nadie con algo de corazón nos dejaría abandonados a nuestra suerte aquí en medio" pensé.
Paro el vehículo, y comento el problema. Me cuentan que el pueblo más cercano es Altura, a unos 15Km, y que de ahí a Gátova donde tenemos el coche, son otros 15 más. A continuación relato una serie de sabias frases y soluciones que los amables lugareños nos dieron para solucionar nuestro problema.
"por ahí detrás, hay una masía, mirad a ver si os pueden ayudar", les faltó apostillar, "que nosotros pasamos"
"podéis subir a uno de esos cerros, a ver si hay cobertura, y podéis llamar para que alguien os venga a recoger" , no había cobertura en la zona, y para subir a los cerros, había que saber escalada, y tener la instrumentación adecuada.
"si volvéis por donde habéis venido, es más corto", si, es verdad, huibiéramos andado 3km menos.
"bufffff, andando hay una tirada....." inteligente comentario.
en fin, que como véis, hemos podido disfrutar de la amabilidad de las gentes de la zona.
Klass, no se lo creía, ¿cómo explicar a un holandés, que no todos los españoles no somos unos "mamones", cuando nos han dejado abandonados a 15kms de la civilización? Tuve que explicarle que los españoles no somos así, solo los de esa zona. Parece que quedó medio convencido.
Finalmente nos planteamos dos opciones.
1ª Intentamos arreglar todos los pinchazos con los parches que tenemos.
2ª si falla la primera, Klass iría andando, y yo en bici a por el coche.
Finalmente, la primera opción dio resultado, después de unos 12 parches, y dos botes de líquido repardor, conseguimos que la cámara no perdiera aire.
Decidimos continuar por carretera, más bien "via parque", nos quedaban por delante 30Km rezando para que la rueda aguantara.
Finalmente llegamos al coche, la rueda aguantó, pero nuestro cuerpo no podía más, habían salido 45 kms de ruta, contando con que los 10 últimos habían sido la subida al puerto de Chirivilla, con un desnivel medio de en torno al 5%, y a las 14:00h. Gracias que no ha sido uno de los fines de semana más calorosos del verano, si no, igual no estaría escribiendo esto ahora mismo.
Antes de echar las bicis al coche, nos dimos un homenaje en el bar de la zona, nos habíamos ganado toda la cerveza que hubiera en ese pueblo.
Así termina nuestra odisea Valenciana, no se si alguna vez repetiremos.
AUPA PAKETS
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Jordan retro 4 -